La principal adoración al Abba le es ofrecida por Sus primogénitos, que son los que tienen parte en Su Tabernáculo, pues ellos son la conformación del mismo.
Los primogénitos son los portadores de la vida espiritual, que es la gloria de Elohim, y son ellos los que están comisionados para manifestar esa gloria y ministrar el corazón de aquel que es el dueño legítimo de la gloria, Yahveh el Temible.
El ministerio de los primogénitos de Elohim fue desempeñado en la antigüedad por los levitas, que fueron escogidas para ser los portadores de la primogenitura de Israel, y por causa de ello, eran estos quienes tenían acceso a la presencia de Elohim, y quienes tenían a su cargo el cuidado de las cosas santas con las que se ministraba al Altísimo, pues estos son privilegios y responsabilidades inherentes a la primogenitura de las primicias del Altísimo, que somos los que estamos para ministrar en Su Tabernáculo, que es El mismo.
Y Yahveh habló a Moisés, diciendo: Haz que se acerque la tribu de Leví, y hazla estar delante del sacerdote Aarón, para que le sirvan, y desempeñen el encargo de él, y el encargo de toda la congregación delante del tabernáculo de reunión para servir en el ministerio del tabernáculo; y guarden todos los utensilios del tabernáculo de reunión, y todo lo encargado a ellos por los hijos de Israel, y ministren en el servicio del tabernáculo. Y darás los levitas a Aarón y a sus hijos; le son enteramente dados de entre los hijos de Israel. Y constituirás a Aarón y a sus hijos para que ejerzan su sacerdocio; y el extraño que se acercare, morirá. Habló además Yahveh a Moisés, diciendo: He aquí, yo he tomado a los levitas de entre los hijos de Israel en lugar de todos los primogénitos, los primeros nacidos entre los hijos de Israel; serán, pues, míos los levitas. Porque mío es todo primogénito; desde el día en que yo hice morir a todos los primogénitos en la tierra de Egipto, santifiqué para mí a todos los primogénitos en Israel, así de hombres como de animales; míos serán. Yo Yahveh. Números 3:5-13
Es por esta razón que la adoración a Yahveh siempre ha sido perfecta únicamente en los varones del linaje santo, donde desde el principio ha reposado la semilla de bendición, y han sido estos quienes han recibido la revelación que respecta a la correcta adoración al Elohim de los Cielos, tal es el caso de nuestro padre David, varón conforme al corazón de Yahveh, porque en él descansaba la semilla principal del linaje santo, y fue él quien recibió la revelación de la alabanza y adoración que Yahveh demandaba, y siendo dirigido por el Ruaj erigió lo que hoy conocemos como el Tabernáculo de David, que es el Tabernáculo de Elohim en la Tierra, y es ese Tabernáculo el que tú y yo estamos hoy restaurando, para dar a Yahveh el culto que Él demanda de Sus hijos, un culto en el que se le adore en Espíritu y en Verdad, pues ningún que no sea un verdadero adorador que adore como tal puede tener parte en el Tabernáculo de David.
Y conoció de nuevo Adán a su mujer, la cual dio a luz un hijo, y llamó su nombre Set: Porque Elohim (Dios), dijo ella, me ha sustituido otro hijo en lugar de Abel, a quien mató Caín. Y a Set también le nació un hijo, y llamó su nombre Enós. Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Yahveh. Génesis 4:25-26
El nombre de Yahveh empezó a ser invocado a partir de que la simiente santa empezó a germinar en la Tierra, pues el Nombre de Yahveh es invocado y honrado por aquellos que están llamados a tener Su imagen, la imagen de Elohim, que es en la faz de Yeshua Ha Mashiaj, y dicha imagen que habíamos perdido, es la que estamos reconquistando hasta el día de su manifestación. Empero, la imagen de Elohim es privativa de los que de Él salieron, pues la imagen de un Padre se encuentra únicamente en Sus hijos, pero lo que queremos destacar es la relación de la adoración genuina y real con los hijos de Elohim, los que vienen y portan el linaje y la semilla de bendición, el linaje bendito de Yahveh.
Ahora bien, ha satán no ignora la implicación de la adoración al Abba, y la trascendencia de que los hijos legítimos de Yahveh, que dé El salimos y a Él volveremos, seamos un pueblo que alabe y adore a su Elohim de todo Su corazón. En razón de ello, ha querido siempre malear la verdadera adoración, mezclandola, a fin de que quien reciba gloria por medio del culto que se rinde en las naciones sea el espíritu de las tinieblas, y no el Abba de las luces.
Es por esto que en el mundo y las naciones que lo conforman encontraremos que millones de personas creen que le sirven a Elohim, y creen que Él está agradado con los diferentes sacrificios que estos ofrecen a Adonai, lo que ignoran es que le sirven de manera equivocada, pues como ya te he dicho, al único y verdadero Elohim solo se le adora de una sola forma, en Espíritu y en Verdad, así, ha satan ha mantenido al mundo en el desconocimiento en este respecto por medio de la religiosidad, que no es sino una rama más de la propia idolatría, y aunque muchos no adoran ídolos desde el punto de vista físico, la manera religiosa en que profesan servir a Adonai no es sino un tipo de idolatría, pues la realidad de los religiosos es que aunque tu veas que dicen servir y adorar a Elohim, en el fondo se sirven a sí mismos y buscan el renombre y el reconocimiento propio, y al hacerlo así, son las tinieblas quienes reciben gloria por medio de los muchos sacrificios que en su ceguera espiritual ofrecen los religiosos.
La alabanza está ligada a la identidad de la tribu de Juda. El propio nombre de Judá significa “Alabanza”, y es que la alabanza es la copa que Yahveh puso en manos de Judá. ¿Por qué? Porque es la alabanza la que restaurara el verdadero culto, y la que por consiguiente desarraigara del corazón de los hijos del Altísimo el carácter religioso y ciego del culto que ordinariamente se ofrece a Elohim. Pues es la alabanza a Yahveh en la que la gloria del Elohim Vivo es manifestada, y es esta gloria la que consume y deshace las tinieblas. Donde Judá alaba a Yahveh, usted puede estar seguro que la gloria de Adonai se hace manifiesta. Por eso te hable hace un rato de que en la primogenitura está la vida espiritual, que es la misma gloria y accionar del Ruaj Ha Kodesh. Esta gloria descansa en la primogenitura de Israel, y es manifiesta por la alabanza de los tales.
Pero tú eres santo, Tú que habitas entre las alabanzas de Israel. Salmo 22:3
¿Dónde habita Yahveh? En las alabanzas de Israel, y donde tal alabanza a Él se ofrece, El inequívocamente se hace presente.
Es por eso que tu alabanza y mi alabanza está llamada a ser perfecta, pues es esta alabanza la que destruye los cimientos de las tinieblas y establece en señorío del Único y Verdadero Elohim, Yahveh Sebaot.
Ministerio Mesiánico de Salvación La Sangre de Yeshua
Ev. Isaac Mercado
